Al final de la vida Dios verá cuando amor hay en nuestro corazón y nos juzgará con su misericordia.
DESARROLLO
PRIMER MOMENTO
Oración en la Capilla.
SEGUNDO MOMENTO
Leemos y explicamos a los niños el tema 43 del Catecismo Jesús es el Señor (páginas 130 y 131).
Ideas:
Dios quiere que digamos “Sí” a su amor y así participemos siempre de su Reino.
El Reino de los Cielos es un Reino de Justicia, Verdad, Amor y Paz.
Al final de nuestra vida Dios mirará nuestro corazón y nos recompensará según nuestras obras.
Quien rechace a Jesús queda excluido e irá al infierno.
En el Cielo, con Dios, están ya la Virgen María y todos los Santos. Y Dios quiere que estemos también con ellos.
Algunas personas necesitan más tiempo para ir al cielo porque el pecado ha dejado una huella en ellos, y hasta que no se la borren no van al Cielo. A este lugar se le llama Purgatorio.
Cuando rezamos por nuestros difuntos les ayudamos a que vayan al Cielo transformados por el amor de Dios.
Al final de nuestra vida Jesús nos dirá: Mt 25, 34-36.
Dinámica del corazón:
Le damos a cada niño un corazón como el del dibujo y le pedimos que escriban dos cosas en él:
Por una cara todo lo que hacen de corazón y de buena gana.
Por otra cara todo lo que no hacen de corazón y lo realizan a disgusto.
Puesta en común de lo que cada niño ha escrito.
Diremos a los niños que si nosotros queremos ir al cielo con Jesús y la Virgen María siempre en nuestra vida tendremos que cambiar lo que no hacemos de corazón y con desgana. Así estaremos siempre cerca de Dios.
Repasamos con los niños las preguntas 46, 47 y 48 del Catecismo Jesús es el Señor en las páginas 143 y 144.