Al ser bautizados estamos llamados a vivir como hijos de Dios porque tenemos que seguir a Jesús.
Seguir a Jesús es responder a su llamada, amando a Dios y a los hermanos como Él mismo nos enseñó.
Por el Espíritu, que vive en nuestro corazón, podemos seguir a Jesús y cumplir sus Mandamientos.
DESARROLLO
PRIMER MOMENTO
Oración en la Capilla.
SEGUNDO MOMENTO
Leemos y explicamos el tema 13 del Catecismo Jesús es el Señor: “Jesús nos anuncia la Buena Noticia, el Evangelio” (páginas 46 y 47).
Ideas:
Jesús predicó el Evangelio por todas las ciudades y aldeas de Palestina y anunciaba la Buena Noticia.
No todos acogían la Buena Noticia de la misma manera.
Para ello se necesita un corazón limpio y confiado.
Quien confía en Dios quiere estar siempre con Dios y poner en práctica lo que Jesús nos enseña.
El corazón de la predicación de Jesús son las Bienaventuranzas donde Jesús nos invita a tener un corazón sencillo y pobre; misericordioso, que busque la paz, que sea bueno, que no se avergüence de ser su amigo…
Jesús da gracias a Dios por los que tienen un corazón sencillo. (Ver Lc 10, 21).
La Iglesia nos enseña la Buena Noticia de Jesús que está escrita en los 4 Evangelios: Mateo, Marcos, Lucas y Juan.
Juntos vemos y aprendemos la canción: Bienaventurados.
Comentario:
¿Qué es lo que más te ha llamado la atención?
Vemos con los niños las Bienaventuranzas en el Catecismo: página 154.
Las comentamos explicándolas desde la canción que hemos visto. (Sería muy bueno que tú catequista la prepares y reflexiones un poco en casa antes de la catequesis).
Dinámica: ¡Sorpresa!
Escribiremos en distintos papeles acciones relacionadas con las bienaventuranzas.
Vamos sacando las acciones y los niños tienen que decir con qué bienaventuranza está relacionada.
LAS BIENAVENTURANZAS
Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los cielos.
Acción: Compartir lo que tengo con un pobre.
Bienaventurados los mansos, porque ellos poseerán en herencia la tierra.
Acción: No contestar.
Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.
Acción: Consolar a un compañero que llora y es´ta triste.
Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.
Acción: Luchar contra las injusticias: cuando se meten o ríen con un compañero.
Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
Acción: Perdonar cuando me ofenden.
Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios.
Acción: Pensar bien de todo el mundo.
Bienaventurados los que buscan la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios.
Acción: Separar a unos compañeros que se pelean.
Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los cielos.
Acción: Decir siempre la verdad, aunque por ello te castiguen.
Bienaventurados seréis cuando os injurien, os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa. Alegraos y regocijaos porque vuestra recompensa será grande en los cielos.
Acción: No avergonzarse de ser cristiano aunque por eso se rían de ti.